Eramos varios los dibujantes de aquella época, que gustábamos de dar un plus de realismo a las viñetas, a base de montar "storys" fotogáficos previos con gente próxima y sufrida.
Así, todo parecía más auténtico y supuestamente, el terror más próximo.
Pues he aquí, que en esta ocasión, todo quedó en casa.
Mi sufrida esposa y yo mismo, nos vimos (yo con un ojo desviado) de pobres pescadores, y lo que es mucho peor, de zombis de guardarropía.
No se yo, si casi 40 años despues, Marta me lo ha perdonado.
El texto previo con la fotito aparece aquí, primero para ver el presunto parecido, y segundo, porque leyendolo ahora, me hace gracia constatar que sigo pensando igual, y que mis proyectos siguen sin cumplirse.
Que sea por muchos años!
Jo! Buenísimo! No sólo "matas" a tu mujer, sino que vas a pescarla de nuevo y ella en zombi te mata a ti... Que loco, hombre. Pero debió ser divertido hacerlo, aunque entiendo que tu mujer no te lo perdone.
ResponderEliminarPues si, y lo que es peor, nuestro hijo Marc, (el ahora lilustrador y diseñador) con 3 años, merodeando por el estudio, que en aquel entonces y por muchos años fué comedor y "sala de estar".
ResponderEliminarEn ocasiones pienso que de haber vivido en segun que pais, nos hubieran arrebatado la patria potestad por traumatizar al niño con esas imágenes terroríficas.
Y en cierta forma le debió influir, aun le encanta dibujar monstruos, eso si bastante más amables, Si visitais "Marc Monés" lo comprobareis.
Gracias Diego, eres un pozo de conocimientos, sabes mucho más que yo mismo de mis propias historietas.