En este rincón de las técnicas ilustrativas tradicionales (en vias de extinción y espero que algun día, declaradas técnicas protegidas) no voy a olvidar la ilustración al aguada o aguatinta. Se trata de mezclar tinta china negra y agua, para conseguir todos los tonos del blanco al negro.
Es útil para ediciones en las que, por creer que infantiliza, o por presupuesto, se huye del color.
Es peligroso por las sorpresas que puede provocar el libro impreso. Un mal papel, y el escaso control, al no existir las pruebas de grabador ni de tiraje, pueden dar al traste con la presunta calidad de los originales... aunque eso de "originales", ahora, es un decir.
En ese caso, el resultado puede ser aun., más imprevisible, pues la pantalla...!SÍ que engaña!
Ilustración interior de "2 CAVALLS" de Gemma Lienas.
Isidre Monés
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